Existen varias tendencias en la búsqueda de empleo que merece la pena poner encima de la mesa ya que nos puede acortar el tiempo de gestión de cualquier oportunidad laboral de forma ostensible.
En la actualidad el 78% de las personas en búsqueda de empleo utiliza las redes sociales y profesionales con ese fin y esa cifra va en aumento hasta llegar casi al 100%. Estas redes consiguen darnos mayor visibilidad e ir creando nuestra marca personal. Y no me refiero sólo a LinkedIn como herramienta fundamental para buscar y ser encontrado, si no que la utilización de Facebook, Twitter o Instagram para obtener información acerca de una persona concreta que nos interesa o que sabemos que nos va a contactar o entrevistar.
Por otro lado, el 86% de las empresas en España tiene presencia en estas redes, lo que nos permite ir mucho más allá en el conocimiento sobre los valores, misión y visión de cada compañía a la que nos acerquemos. Además, el 84% de los profesionales de selección las utiliza para reclutar candidatos. “Si no estás en LinkedIn, para nosotros no existes” estas son palabras textuales de varios Directores de Recursos Humanos a los que conozco bien.
Por lo tanto, estar al día en la aparición de nuevas webs, apps y links relacionados con la búsqueda de empleo es y será un “must”.
En el mercado laboral español casi el 80% de las ofertas se encuentran en el mercado oculto, es decir, que no se encuentran, ya que no se publican. ¿Cómo se accede a ellas? A través de una palabra muy de moda, NETWORK.
Parece obvio, pero no lo es tanto. Nuestra red de contactos es uno de nuestros mayores tesoros y lo que nos permitirá acceder a dichas ofertas.
El problema es cómo gestionarla y diagnosticarla. Hay personas que tienen más de 10.000 contactos en LinkedIn. Y algunos muchos más. Una tendencia es la utilización del BIGDATA para ese análisis que nos permitirá “campañizar” acercamientos, oportunidades y vacantes.
Otra tendencia es que el CV tradicional ha dejado de tener valor, y esto está causado en parte por el proceso de DIGITALIZACION en el que están inmersos la mayoría de las grandes compañías.
Estas deben y quieren facilitar el acceso a ofertas, información relevante de la compañía, estrategia y personas que trabajan en ella. Esto nos permite centrar mucho más el tiro y preparar mucho más concienzudamente cada interacción con la empresa sea o no presencial.
La flexibilidad y adaptabilidad al cambio son las competencias que lideran esta tendencia de futuro. La constante transformación de algunos sectores e industrias, hace que las personas tengamos que adaptarnos a nuevas situaciones en el entorno laboral, más digitales, nuevos grupos de trabajo…
Estar abiertos y predispuestos a asumir nuevos retos y no encasillarnos, nos ayudará a encontrar un nuevo puesto de trabajo y a crecer profesionalmente.
En cuanto a las profesiones más demandadas a corto plazo, vemos como se están creando algunas que hasta hace muy poco no existían: Community manager, big data responsible, IA manager, vibe managers, director experiencia de cliente y empleado…
Adquirir nuevos conocimientos y estar a la vanguardia de estos avances, son claves para adaptar nuestro futuro laboral a lo que está demandando el mercado
Las relaciones contractuales entre empresa y trabajador se están viendo flexibilizadas. Algunas empresas preferirán profesionales contratados por proyecto, a través de programas de Interim Management o como freelance para asignarles tareas y proyectos específicos. El vínculo con la empresa culmina al terminar el proyecto.
Las empresas deberán ser capaces de mantener con ellos una relación que permita un contacto constante en caso de nuevos proyectos, tratarles como uno más, y que se sientan fundamentales y queridos en la empresa, a pesar de estar en una situación mercantil diferente. El SALARIO EMOCIONAL cobra protagonismo mucho más que nunca.
En resumen, el mercado laboral está en una segunda revolución (la primera se produjo hace unos años con la aparición de la tecnología en la búsqueda de empleo) y palabras como NETWORK, BIGDATA, DIGITALIZACIÓN Y SALARIO EMOCIONAL las deberíamos incorporar a nuestro lenguaje de inmediato.