Una frase muy común cuando alguien empieza con la búsqueda de un nuevo proyecto, suele ser ¿cómo transmito mi marca personal? Hay muchas herramientas para ello, pero no debemos olvidar una de las más importantes: nuestro CV. Y es que, aunque muchas veces pensamos que no es tan relevante, es una herramienta más para darnos a conocer a nuestro futuro empleador; y por ello, hay que cuidarla en forma y fondo porque posiblemente sea la primera impresión que tendrán sobre nosotros.
¿Qué debemos pensar a la hora de construirlo? Lo primero que tenemos que tener en cuenta es: ¿qué quiero vender?, ¿qué necesidades tiene el mercado? Una vez tengamos claro qué hemos hecho hasta ahora y hacia dónde queremos dirigirnos, tendremos que hacer un ejercicio de investigación sobre lo que se está demandando en el mercado; tener varias vacantes delante, mirar diferentes perfiles de LinkedIN similares al mío, leer artículos y noticias sobre el sector… y con esta información podré ir recogiendo cuáles son las competencias que hoy en día se buscan sobre mi perfil.
Estas competencias o capacidades que el mercado necesita son las que debemos mostrar en nuestro CV; ya no basta con poner funciones desempeñadas en los diferentes puestos de trabajo, tenemos que dejar claro que sus necesidades las podremos cubrir, y eso se consigue gracias a los logros.
Los logros son ejemplos concretos de aquellos proyectos, acciones o problemas que hemos llevado a cabo con éxito en diferentes situaciones. La clave es identificar en qué soy bueno, que he hecho muy bien hasta ahora y buscar ejemplos concretos que me ayuden a vender esas competencias que yo digo tener, y la empresa quiere comprar. Si los trasladamos con una buena frase y con las palabras clave necesarias, habremos encontrado la solución.
Pero, ¿cuáles son mis palabras clave?, ¿cómo puedo identificarlas? El proceso anterior de identificación de competencias que busca el mercado para un perfil como el tuyo, te ayudará a ver cómo son llamadas con más asiduidad, qué palabras utilizan en las ofertas de vacantes publicadas, cómo buscaría yo a alguien si quisiera que trabajara conmigo, qué palabras utilizaría en un buscador, entre otros. Además de estos ejercicios, también existen herramientas como Google Keyword Tool, Semrush o MOZ, que te permiten escribir diferentes palabras y ver cuántas veces son buscadas al día, lo que te ofrece información sobre si sería una palabra clave a utilizar o no.
Para un mayor impacto, utiliza números, tiempos o recursos para describirlos. No generalices y cuantifica en la medida de lo posible, con cantidades o porcentajes, de modo que resulte fácil comprender la importancia de tus logros y conquistas profesionales.
El dotar de información de este tipo un CV, aporta más valor y ayuda a transmitir cómo trabaja una persona, cuáles son sus valores y qué es lo que busca en un nuevo proyecto; en definitiva, ofrece más información sobre cómo es la persona en cuestión y saber si encaja en la compañía, departamento o puesto concreto.
En los tiempos que corren es importante tener, además de un CV tradicional, un CV digital que incluya perfiles en RRSS, prensa, conferencias, web personal, etc. Hay que empezar a tener en cuenta todos estos puntos para crear nuestra marca personal y ganar visibilidad ahí fuera.
Y ahora, si nos centráramos en la red social profesional más relevante, ¿cómo se trasladaría todo esto a un perfil de LinkedIN? Muy sencillo, debemos partir de las preguntas que planteabamos, ¿qué quiero vender o transmitir sobre mí como profesional?, ¿cuál es mi ventaja competitiva?, ¿por qué y para qué lo quiero? A partir de ahí, se deberá trabajar el perfil pensando en las palabras clave que, sí o sí, tienen que estar para aparecer en las búsquedas que nos hemos puesto como objetivo. Recordemos que, cuanto más arriba del perfil y más veces salgan, más importantes serán y con mayor facilidad apareceré en las búsquedas.
A partir de ahí, será bueno comenzar a trabajar el resto del perfil en cuanto a contenido de publicación, actividad en grupos, recomendaciones y, por supuesto, logros que ayuden a diferenciarse y a ser más atractivo para un posible futuro empleador. Es importante crear valor y capturarlo. Ser experto en algo y saber ser reconocido como tal.